El embajador de China en la República Dominicana, Chen Luning, habla con periodistas dominicanos en una reunión en la embajada en Santo Domingo. Embajada de China
En una recepción celebrada el viernes para periodistas dominicanos en la Embajada de China en Santo Domingo -una imponente torre que se destaca entre los edificios del centro de la ciudad- el embajador Chen Luning ofreció un panorama detallado del estado actual de las relaciones bilaterales entre China y República Dominicana.
Su mensaje fue claro: para China, República Dominicana es un amigo, socio y actor clave en su expansión hacia el Caribe y Centroamérica.
Han pasado siete años desde que los dos países formalizaron relaciones diplomáticas. Desde entonces, dijo Luning, los lazos entre las dos naciones se han "intensificado" y "la confianza política mutua continúa fortaleciéndose".
El embajador chino Chen Luning. Embajada de China
Comercio, inversión, agricultura, tecnología y cooperación definen la agenda común entre los dos países.
"En China, la República Dominicana es básicamente considerada un amigo y un socio", dijo el diplomático a los periodistas.
Destacó que el país es el mayor socio comercial de toda la región del Caribe y Centroamérica, posición que refleja la importancia estratégica de Beijing para el mercado dominicano.
Comercio "sólido"
China mantiene su posición como segundo socio comercial de República Dominicana, posición que "sostiene firmemente".
Según los datos compartidos por el embajador, el comercio bilateral superó los 5.000 millones de dólares y sólo en los tres primeros trimestres de 2025 aumentó un 2,3%.
Explica que este crecimiento se debe al interés de las empresas chinas por invertir y expandirse en el país.
Embajador Luning conversa con periodistas dominicanos. Embajada de China
Luning señala que tres o cuatro empresas manufactureras chinas ya han instalado fábricas bajo el régimen de zonas francas, particularmente en Santiago, San Pedro de Macorís y Las Américas.
La razón de este interés, según Luning, es la estabilidad política y económica de República Dominicana, combinada con una política que "favorece la racionalización de la inversión extranjera".
"Es una vía que tiene mayor potencial de refuerzo", afirma el diplomático.
"La tecnología y la experiencia china pueden servir para diversificar y promover el más alto nivel tecnológico e industrial en República Dominicana", afirma.
Cooperación agrícola
La agricultura es otro área que China considera estratégica para su relación con el país.
Luning señala que China es uno de los mayores productores agrícolas del mundo y tiene la oportunidad de contribuir a la modernización del campo dominicano.
Por ejemplo, mencionó un proyecto con Bioarros en Bonn, donde técnicos chinos están trabajando con el Ministerio de Agricultura dominicano para introducir semillas híbridas de arroz y nuevas técnicas de siembra y manejo.
Periodistas dominicanos posan con el embajador Luning mientras sostienen el libro del presidente chino Xi Jinping sobre gobernanza y administración china. Embajada de China
El programa se lleva a cabo desde hace cuatro años y, según el diplomático, ha dado "buenos resultados".
China también ve oportunidades para apoyar la producción dominicana de frutas, café y cacao, así como la mecanización agrícola mediante la instalación de maquinaria de fabricación china.
Sin embargo, señala que en la agricultura "queda mucho por hacer para conectar a los dos países".
Donación de una ambulancia
China también ha apoyado a Santo Domingo con ayuda y cooperación para "mejorar el bienestar de su pueblo".
El embajador Luning recuerda algo que muchos dominicanos ven en las calles todos los días: 120 ambulancias donadas por China, que están fortaleciendo el sistema de ambulancias del país.
Las ambulancias han "reforzado eficazmente la capacidad de respuesta a emergencias", afirma.
"Respeto, igualdad y cooperación"
El embajador Luning describe el clima actual en ambos países como un período de confianza política, en el que la relación se guía por tres principios: "Respeto mutuo, trato igualitario y cooperación mutuamente beneficiosa".
Esos principios "constituyen la esencia permanente de la relación entre China y República Dominicana", enfatizó.
Dice que el siguiente paso para profundizar esta alianza se describe en el XV Plan Quinquenal de China. Este programa nacional de desarrollo define cada cinco años las prioridades económicas, tecnológicas y sociales del país asiático.
"China está dispuesta a trabajar junto con la República Dominicana y todos los países del mundo para garantizar que los frutos de la modernización traigan beneficios más amplios y más equitativos a la gente y construyan un futuro más próspero para toda la humanidad", dijo.
China: economía, exportaciones, tierras raras
El embajador Luning ofreció a los periodistas una visión general del crecimiento económico y la estabilidad social, comercial y tecnológica de China.
En 70 años, el PIB de China aumentó 223 veces, mientras que el PIB per cápita aumentó 89 veces. La economía de China representa alrededor del 17% de la economía mundial.
Se espera que el PIB alcance los 20 billones de dólares este año. En los últimos cinco años, el país ha mantenido una tasa de crecimiento promedio del 5,5%. Su contribución al crecimiento global es de alrededor del 30%.
"Si a China le va bien, el mundo también será mejor", afirma el embajador.
China es el principal exportador mundial de automóviles. Produce más del 70% de las baterías de litio del mundo.
Suministra el 70% de los módulos solares del mundo y el 60% de los equipos de energía eólica. Proporciona el 90% de las tierras raras utilizadas por la industria mundial.
China también ha sacado de la pobreza a más de 800 millones de sus ciudadanos.
Al mismo tiempo, el país amplió su apertura y se convirtió en un socio comercial líder de más de 150 países y regiones.
El embajador recordó que China, en el marco de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, impulsó más de 200 proyectos de infraestructura en América Latina, creando más de un millón de empleos.
El comercio entre China y la región ha alcanzado los 500 mil millones de dólares, 40 veces más que a principios de siglo.
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